En un emotivo sepelio en el Cementerio Central de Aguachica (Cesar), fue despedido Santiago Lora Rincón, joven que se convirtió en la cuarta víctima mortal de la masacre ocurrida el pasado 29 de diciembre. Junto a sus padres, los pastores Marlon y Yurlay Lora, y su hermana Ángela, Santiago perdió la vida tras ser atacado por sicarios en moto. Aunque luchó por sobrevivir, su fallecimiento se produjo el 31 de diciembre.
La comunidad de Aguachica, profundamente conmovida, acompañó el cortejo fúnebre con canciones, flores y oraciones en honor al joven. Los cuerpos de los cuatro miembros de la familia ahora reposan juntos en el camposanto.
Durante la ceremonia, el pastor Giovanny Bustamante, de la Iglesia Príncipe de Paz Central, ofreció un mensaje de consuelo y esperanza a los asistentes: “Podemos ser derribados, pero no destruidos. Debemos seguir adelante con fe, recordando que el Señor está con nosotros en los momentos más difíciles”.
El caso de Santiago Lora sigue bajo investigación, mientras las autoridades buscan esclarecer los hechos detrás de esta masacre que ha conmocionado al municipio y al país.
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