La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, le envió una carta abierta al presidente Gustavo Petro, expresando su preocupación por lo que calificó como presiones políticas indebidas contra su administración. La misiva se dio a conocer tras los señalamientos del jefe de Estado, quien prácticamente responsabilizó a la mandataria seccional por el hundimiento de la consulta popular en el Senado, la cual fue rechazada con 49 votos en contra frente a 47 a favor.

Toro manifestó que es «un exabrupto» condicionar el avance de obras clave en el departamento por motivos políticos, y rechazó que se haya ordenado desde instancias gubernamentales «pararle todo a la gobernadora del Valle», como lo habrían revelado mensajes divulgados por medios como Cambio.

En su carta, la mandataria regional defendió su actuar y rechazó las acusaciones de traición que han surgido tras el resultado en el Congreso. Recordó que no tiene injerencia directa sobre las decisiones legislativas, y subrayó que su partido, la U, incluso propuso una reforma laboral alternativa, alineada con los objetivos del Gobierno Nacional.

«En la democracia, estas causas no son patrimonio de una sola tendencia política, sino que se construyen con el aporte de todos», afirmó Toro, al tiempo que pidió al Ejecutivo no usar las diferencias políticas como obstáculo para el desarrollo de tres megaproyectos estratégicos para el Valle del Cauca.

La gobernadora insistió en la necesidad de garantizar que la política nacional no entorpezca el bienestar regional, y llamó al respeto institucional y a la colaboración intergubernamental.